¿Aprender inglés cantando?

Hace unos días fue noticia el fallecimiento de George Martin, el que fuera productor de los Beatles, y gracias a quien el mundo entero pudo comenzar a conocer y disfrutar de sus canciones.

Debo confesar, sin temor a demostrar mi poco conocimiento musical, que no tenía ni idea de quién era el buen señor hasta el día en que murió y salió en las noticias. Sin embargo, me recordó algo que tenía guardado muy dentro y que me parece interesante compartir: algunas canciones de los Beatles forman parte inseparable de mi aprendizaje del inglés.

Baladas como Love me do y To Know Her is To Love Her, cuyo ritmo, entonación y pronunciación me esforcé en copiar y repetir hasta que volvía locos a todos en casa, fueron esenciales en mi aprendizaje. Ni que decir tiene que yo no había nacido cuando los Beatles hacían llorar de histeria fan a las adolescentes de medio mundo, pero ya me habría gustado vivir esa experiencia. Con 17 o 18 años imaginaba la agitación que esas chicas habrían sentido y me emocionaba intensamente, como uno sólo hace a esa edad.

Para finales de los 90 internet existía, aunque estaba muy lejos de ser lo que es hoy, y no teníamos tan a mano las letras de las canciones (las lyrics) para poder cantarlas. Algunos discos sí que las incluían, pero era una escasa minoría, así que «sacaba la letra» de mis canciones favoritas yo misma. Para eso tenía que prepararme bien: cascos, cinta, radiocassette, libreta y boli en mano y nadie que me molestara. Escuchaba una y otra vez, como si fuera un dictado, ponía lo que entendía en mi libreta, paraba, rebobinaba, volvía a escuchar, over and over again… Era un milagro cómo esas cintas podían resistir las miles de veces que las paraba y volvía a poner. Los CDs de hoy no son ni mucho menos tan resistentes.

En fin, que después de poner en la libreta lo que yo pensaba que decían las canciones, no descansaba hasta asegurarme de que estaba todo bien: hablaba con profesores o amigos ingleses que me ayudaran a corregir lo que había entendido o escrito mal. Y al final tenía la letra de mi canción. Y la cantaba una y otra vez, y otra vez más, hasta que me la sabía de memoria. Y me exigía a mí misma pronunciar igualito igualito que en la canción. Y después de mucho trabajo, lo conseguía.

No soy capaz de cuantificar hasta qué punto el tomarme tan en serio «sacar la letra» de las canciones contribuyó a mi aprendizaje del inglés, pero puedo afirmar que mucho, mucho, mucho. Gran parte del inglés que sé hoy se lo debo a aquella inquietud de adolescente que quería entender y cantar la música que le gustaba.

Por ello, ya en calidad de profesora, insisto tanto a mis alumnos con la música. Son todo ventajas, y además funciona. Hoy en día tenemos a nuestro alcance todos los títulos que queramos, en cualquier idioma, y sus letras.

Las canciones que disfrutamos pueden enseñarnos varias cosas:

a) vocabulario: porque reúnen familias de palabras o términos relacionados con un mismo tema: el amor, la vida diaria, los amigos, la pena, el arrepentimiento, etc… Y los vemos funcionando juntos en contexto, lo que nos ayuda a recordarlos. Además, nos permiten actualizar nuestro vocabulario con términos coloquiales y del día a día.

b) estructuras: muchas canciones presentan una estructura gramatical principal, dependiendo del tema. Por ejemplo: en Please Love Me Do los imperativos, en Yesterday los pasados, y ya por poner un ejemplo actual, R. City y su Locked Away donde tenemos un montón de condicionales y formación de preguntas. ¡Son un tremendo compendio gramatical!

c) pronunciación, entonación, ritmo, que son tan diferentes al del español, y que en frío nos cuesta mucho copiar y aprender, nos entran muy bien mientras los cantamos.

Lo mejor de todo: aprendemos pasando un buen rato, mucho mejor que cogiendo un libro de inglés y aprendiendo con un texto. Con nuestra música favorita podemos elegir qué nos apetece escuchar, cuál es nuestro humor hoy (¿estoy de subidón y me apetece algo alegre? o ¿quiero llorar hasta que no me queden lágrimas y hablar del desamor?). Y hoy lo tenemos tan fácil: a mano en el teléfono, y gratis.

Algunas herramientas a tu alcance:

  1. Puedes ver vídeos musicales en Youtube o vimeo. Pon en su buscador la canción que te apetece según tu humor hoy, por ejemplo: «Gloria Gaynor I will survive lyrics«.  Y tendrás el vídeo con las letras, para que lo puedas ir cantando al tiempo que lo lees.
  2. Si te gusta mucho una melodía pero no la conoces, puedes «shazamearla» con tu móvil, bajándote una sencilla aplicación que adivina qué canción estás oyendo con sólo escucharla unos segundos. Una vez que la descubres, tienes información sobre el cantante, la letra, etc. A mí personalmente  me gusta mucho esta app.
  3. Para escuchar la música que te apetece no es necesario comprarse todos los CDs. En Spotify o Deezer tienes a tu disposición toda una biblioteca musical, sin anuncios en su versión premium. También tienes acceso a las letras y puedes cantar a lo karaoke si te apetece. Sing along!
  4. Lyrics training es una web en la tienes a tu disposición una enorme cantidad de títulos en varios idiomas. Se elige el video y el nivel (principiante, intermedio, avanzado y experto) y hay que rellenar los huecos con las palabras que faltan.
  5. Hay otro tipo de webs que son auténticas bibliotecas de letras musicales como:  Song LyricsAZlyricsMetrolyrics.

Ninguna de estas herramientas tiene éxito sin tu trabajo y tus ganas. Empieza primero por las canciones fáciles que más te gustan y cuando vayas cogiendo confianza ponte a prueba con alguna más rápida. Suele ser más productivo empezar con baladas lentas, aunque algunas resulten ser un poco ñoñas. Ve poco a poco aprendiendo la letra, hasta que la puedas cantar de memoria, sin mirar.hombre-que-canta-con-la-escoba-16418738

Te divertirás aprendiendo y no se te olvidará. Y si al mismo tiempo te sueltas la melena y lo bailas, el efecto es triple! La música es pegadiza y su ritmo se nos mete en la cabeza, lo que nos ayuda enormemente a memorizar. Prueba de ello es que 25 años después de cantar a los Beatles, me sigo sabiendo de memoria sus canciones!

6 comentarios en “¿Aprender inglés cantando?

  1. Susana dijo:

    Me gusta mucho el artículo, creo que tienes mucha razón. Y a propósito de lo que cuentas, ¿has visto la película «Vivir es fácil con los ojos cerrados»? Es española, hace un par de años (creo) se llevó varios premios Goya y, efectivamente hace alusión a la canción de los Beatles. Está basada en la historia real de un profesor de inglés de de los años 60, que enseñaba a sus alumnos con canciones de este grupo y que llegó a hablar con él para pedirle que incluyera las letras de sus canciones en los discos. El profesor pensaba, como tú, que escuchando y traduciendo las letras se aprendía inglés, pero también otras muchas cosas y además era muy entretenido ¿casualidad?, no lo creo, jeje.
    Es una peli muy entrañable que te recomiendo, si es que no la has visto.

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